miércoles, 29 de diciembre de 2010

Illescas Comunera


Felipe y Juana
En 1502 en los primeros días del mes de Mayo, la Princesa Doña Juana y su esposo el Archiduque Felipe, al trasladarse de Segovia a Toledo, para ser jurados como príncipes de Castilla, hacen estancia dos o tres días en Illescas.
Pero al ponerse en marcha la comitiva, hacen alto en Olías sin llegar a Toledo, por indisposición del Archiduque.   

Hasta la mayoría de edad el Emperador Carlos I, pasa  Illescas por las vicisitudes propias a su importancia, a más las alteraciones de aquella época, donde todavía figuraba como principal plaza fuerte cuando el alzamiento de las Comunidades.
 Illescas fue de las primeras en seguirlas, pero no así el Alcalde de su Alcázar, Don Juan de Arias, que  defendió con tesón a la corona, por lo cual, más adelante el Emperador le recompensó con el Condado de Puño enrostro.





A ellas perteneció Don Francisco de Guzmán, hijo de esta villa. Capitán de las Compañías de Padilla, con él peleó en la batalla de Villalar y, logrando huir, siguió guerreando en esta provincia a las órdenes de la viuda de Padilla y del Arzobispo Acuña.
Confiscados sus cuantiosos bienes, fue arrasada su casa y su solar sembrado de sal (costumbre de la época para que no creciese nada). En la casa que sobre éste se alzaba una lápida conmemorativa de tan noble personaje, la cual fue costeada íntegramente por suscripción popular.

Los comuneros Padilla, Bravo y Maldonado en el patíbulo. (Antonio Gisbert
 La Viuda de Padilla llamada María  Pacheco,  nace en Granada en 1437 y muere en Oporto en 1531. Los años más importantes y difíciles de su vida los pasa en Toledo, junto a su esposo, Juan de Padilla, uno de los principales dirigentes de la Comunidad. Tras la derrota de los comuneros en Villalar, en abril de 1521, María asume el mando de los sublevados, hasta que capitula ante el emperador Carlos en febrero de 1522.Doña María se encontró con una prematura viudez pero también con la herencia inmaterial que le dejó Padilla. Ella es una de las pocas mujeres sin sangre real que han aparecido en los libros. María   fue una mujer culta, siempre apoyó la lucha de las comunidades castellanas e incitó a su esposo a participar en ella. Al recibir noticias sobre lo ocurrido en Villamar, María cayó enferma, pero en vez de abandonar tomó el mando de la resistencia comunera. Fue una mujer de carácter, que logró evitar la rendición de haciendo frente a los realistas de Carlos V hasta la caída "definitiva" de Toledo, el 3 de febrero de 1522. Finalmente la revolución comunera fue sofocada y Maria Pacheco se vio obligada a huir a Portugal con su hijo para salvar la vida, con la esperanza de volver a Castilla, con un nuevo alzamiento de las comunidades .Por su resistencia, fue excluida de cualquier tipo de perdón otorgado por Carlos V a los comuneros.
En marzo de 1531 muere siendo enterrada en la catedral de Oporto, por no conceder el rey permiso para que sus restos reposaran en Villalar junto a los de su marido, como era su deseo.
Sus hazañas la hicieron famosa entre el pueblo castellano, que la llamó "la leona de Castilla".Una de las frases más conocidas de María Pacheco es:
María Pacheco de Padilla después de Villalar (1881). Lienzo de Vicente Borrás y Mompó
“Soy no más que una débil e infeliz mujer pero estimulada por el dolor, tomaré a mi cargo la guerra, pues nada deseo con más ansias que imitar el valor de mi esposo; y, según se presente la fortuna, o vengar su muerte y asegurar la libertad de los pueblos, o morir imitando su ejemplo.”
”En una sociedad en la que la mujer era relegada a un segundo plano, María Pacheco supo hacerse un sitio, luchó y se hizo respetar liderando la causa comunera, siendo ejemplo de mujer luchadora y de principios.

sábado, 18 de diciembre de 2010

Realeza en Illescas.



Enrique III, viene a reponer su salud al pueblo de Illescas, después de que la peste asolase Madrid en 1394. Su hijo Juan II, pasó largas temporadas durante su infancia y su tío y tutor, el infante Don Fernando, le acompañaba en ellas, cuando sus deberes, como regente del reino, se lo permitían. Durante su reinado, siguió favoreciendo a esta villa por su marcado aprecio y envía a su esposa la reina Doña María a dar a luz en Illescas, y nombra el numeroso séquito que la acompaña, entre el cual figuran doña Teresa Ayala y su hija doña María, bastarda del Rey Don Pedro; sacando autorización para que pudieran abandonar el convento y asistir a la reina.
 El parto fue el 5 de octubre en el que vino al mundo la Infanta Doña Catalina. El rey dirigió a la citada Doña Teresa La siguiente misiva:

Medallón que representa a María de Aragón y a su esposo, Juan II de Castilla.
 
“ Yo el rey envío mucho saludar a vos soor doña teresa priora del monasterio de sto. dog. el real de Toledo fagamos saber q por quto la reina mimujer esta en tiempo de parir e en tal caso debe estar cerca della personas destado e vuestras por end acorde q vos estuvieredes alli considento vrd persona por q es cierto q guardaredes lo q a mi servicio cumple por q vos ruego ese placer me haveds de dar q luego partiades dende e vos vayades a la vilia de Illescas donde la dicha reina esta e ustedes ayenella a su encaescimiento ca ese mesmo envio madar e rogar a sor doña maria mi tia q valla ella por end plegaros a pasar mandamos q ambas a vos vayades a estar con la dicha reina segn diche es con lo ql me paredes grad plaser e servicio dada en Ocaña tres dias de septiembre .yo el rey”.   

                                    Firma autógrafa (esta carta se halla en el convento de Santo Domingo el Real, de Toledo).
Convento de Santo Domingo el Real -Toledo principios del siglo XX


En diciembre de 1428, Don Juan II, pasó una de las muchas temporadas en el palacio de la calle Real. (Hoy derruido). Durante ella, tiene  ocasión de recibir y hospedas a Juseph Abencerraje (Abencerraje es el nombre castellanizado con el que se conocer a un linaje nobiliario de origen norteafricano del reino de Granada gobernado por los Nazaríes: los Banu Sarray   بنو السراج; literalmente, 'hijos del talabartero').
Sala de los abencerrajes Alhabra de Granada.
Enviado este del rey moro Mohamed VIII ( al-Haizari 1395-1450) Rey de Granada apodado “el izquierdo” sucesor de Yusuf III. Bajo su reinado comenzaron las guerras internas entre los Abencerrajes y los Zegríes. El rey trata cordialmente a su invitado y le concede una escolta que lo acompañe a Túnez.

También los reyes Católicos la visitaron, aunque menos frecuentemente y al regreso de su estancia en Toledo para mandar edificar el Monasterio de Monjes Franciscanos ( hoy San Juan de los Reyes). Que perpetuase la victoria sobre las armas portuguesas en la batalla del Toro. (Zamora-marzo 1476). Se instalaron largos días en la villa y durante su permanencia hizo la reina activas negociaciones, al efecto de ganarse la confianza del Arzobispo de Toledo.

miércoles, 15 de diciembre de 2010

Contenido de la Carta de Truco o Trueque.

Alfonso XI
En el nombre de Dios, Amén. Porque la razón pide que aquellas cosas que son hechas por los Reyes o por los Emperadores per escrito reconfirmen, per que con la antigüedad de los tiempos no se entreguen al olvido, per eso Yo, Alfonso, Emperador de España juntamente con mi mujer Dª Rica, Emperadora, y con mis hijos Sancho y Fernando, Reyes: A vos Vicente y a todos vuestros sucesores, hago carta de trueque y cambio de aquella villa que está en término de Segovia y que se llama Aguilafuente, y aquella otra que está en término de Toledo y se llama Boadilla; estas dos villas arriba mencionadas, vos las doy por trueque y cambio de la villa de Illescas, la cual vos me dais, y os las concedo a vos con sus tierras y sus términos y pertinencias e con todas sus desechuras para que desde este día las tengáis y poseáis  vos  y todos vuestros sucesores por juro de heredad para siempre jamás; si acaso algún hombre de mi linaje o de otra cualquier calidad que será, este hecho procurare romperle, o ir contra él, sea maldito y descomulgado y con judas, traidor a Nuestro Señor, en el Infierno condenado y peche a la parte del Rey mil maravedises; hecha esta carta en Toledo en la era de mil y ciento y sesenta y dos ( 1124 de la Cristiana), imperando el mismo Alfonso, Emperador en Toledo, en León, Galicia, Castilla, Navarra, Zaragoza, Baeza y Murcia. El Conde de Barcelona, vasallo del Emperador, lo confirma, Sancho, rey de Navarra vasallo del Emperador, lo confirma, y Yo, Alfonso, Emperador de España, esta carta que mandé hacer, con mi propia mano la firmo y la confirmo.


 
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Carta de Alfonso XI otorgada a Medina del Campo
 
















A partir de esta época gana Illescas y adquiere fama parecida a Alcalá, compartiendo los reyes su residencia como sitio de descanso y recreo. El Noble Rey Alfonso XI, hace estancias de larga duración durante su dilatado reinado y firma numerosos privilegios en ella, que así lo atestiguan, uno de ellos, ya en sus postrimerías, dado en Illescas a 30 de mayo, Era de 1385 (1347) a favor de ganados, con algunas libertades de pasto, del convento de religiosas franciscas de la regla de Santa Clara, de Soria, llamadas cuando su fundación, Dueñas de San Damián.
 Juan I, reside con frecuencia sobre todo en su juventud y lo prueba una confirmación suya, siendo todavía infante de Castilla, fechada en Illescas a 9 de Diciembre, Era de 1416 (1378), al privilegio de su esposa la Infanta Doña Leonor de Aragón, dado en Toledo a 15 de Octubre, Era 1413 (1375), a favor del antedicho convento de Soria, por ciertos beneficios sobre las salinas de Atienza.



 Sello de Alfonso XI.

Anverso: Ecuestre. El rey va vestido con cota de malla, con yelmo coronado de tres florones y escudo blasonado con leones y castillos. En la mano levanta la espada desnuda, corta con gavilanes arrollados hacia arriba y pomo compuesto de tres esferillas. El caballo galopa a la izquierda y con las patas traseras invade el campo de la leyenda; lleva testuz y largo caparazón blasonado como el escudo del jinete. La leyenda bordea el sello entre dos gráfilas de cordoncillos: "+ : S : ALFONSYS : ILVSTRIS : REGIS : CASTELLE : ET : LEGIOIS"

Reverso: Cuartelado por una gran cruz, recruzada en sus extremos. En los cuarteles castillos de tres torres almenadas y leones rampantes sin corona. La leyenda igual que en el anverso:
"+ : S : ALFONSYS : ILVSTRIS : REGIS : CASTELLE : ET : LEGIOIS"

jueves, 25 de noviembre de 2010

Contenido de la Carta Puebla, de Illescas.

Fragmento de la Carta Puebla de Illescas .
La Carta Puebla es un privilegio escrito sobre pergamino en latín. Un  documento que contiene concesiones otorgadas por el soberano o señor a los habitantes o nuevos pobladores de un lugar, regulando las condiciones de habitación y tenencia de las tierras y estableciendo las normas fundamentales para la vida jurídica de la comunidad. Están destinadas a favorecer el asentamiento de población en lugares de nueva conquista. Es un fenómeno típico de la Reconquista (v.); se da en los diversos reinos hispánicos y sigue, en general, un paralelismo cronológico con las campañas militares, aunque también aparece en época posterior.

Desde un punto de vista paleográfico su tipo de escritura es la llamada carolina. Destaca por sus trazos gruesos, astiles altos que se incurvan en la primera línea dentro de gran regularidad y simetría, hasta por la acusada tendencia geométrica que es el inicio de la escritura gótica.

Carta Puebla de Ciudad Real.

Carta Puebla de Benavente
Así lo denominan desde el archivo municipal de Illescas. La verdad es que nunca he tenido la dicha, de poder verla, tan solo un pequeño fragmento en el libro “historia de Illescas” Escrito por  Francisco Romo de Arce Torrejón (1995). Y el contenido, que viene reflejado en el libro sobre Illescas, que escribió. Alberto  Aguilar Carmena, “Illescas. Notas histórico Artísticas” (1927). Y que son además de otros apuntes, ideas y recuerdos, los referentes para este pequeño homenaje a Illescas y su Historia.






Carta puebla de la villa de Illescas, concedida por Alfonso VII el Emperador, en Toledo a VIII de los idus de abril era 1192 (de Abril 1154). Versión Castellana.

“En el nombre del Señor, Amen. Yo Alfonso, Emperador de Espala, en unión de mi mujer la Emperatriz D.ª Rica y con mis hijos los Reyes Sancho y Fernando, otorgamos a vosotros los hombres de Illescas así presentes como futuros y a vuestros hijos y descendientes todos, esta carta de donación de cuantas heredades poseáis actualmente y ya poseíais en la villa de Illescas, para que desde hoy disfrutéis libre y pacíficamente, sin que por ello paguéis canon alguno, sino tan solo sendos cahices de pan mediado de trigo y cebada. Y os doy por término a Casarrubios, y a Torrejón, y a Azaña, y a Balaguera, y a Boadilla y dispongo que nadie pueda tener allí heredad sino los gascones, y os doy como fuero que no tengáis en la villa de Illescas Alcalde ni juez, ni Alcaldes, sino gascones, y hágalo para que desde hoy lo hagáis y poseáis vosotros y vuestros hijos y descendientes por juro de heredad perpetuamente, por ser esta mi firme voluntad. Si empero alguien intentare contravenir a ella, sea maldito, excomulgado y condenado al infierno por traidor Judas y peche al erario real mil maravedises. Hecha esta carta en Toledo, era 1192, a VIII de los idus de Abril reinando el referido Alfonso, Emperador de Toledo, en León, en Galicia, en Castilla, en Nájera, en Zaragoza, en Baeza, y en Almería. El Conde de Barcelona, vasallo del Emperador, Sancho , rey de Navarra, vasallo del Emperador. Yo Alfonso, Emperador de España, de mi propia mano corroboro y confirmo esta carta que mando escribir.
El rey Sancho, hijo del Emperador, confirma.
                                                                El Rey Fernando, hijo del Emperador, confirma.
El Conde Poncio, mayordomo del emperador confirma.
                                              Juan, Arzobispo de Toledo y Primado de España, confirma.
El Conde Amalrico, lugarteniente en Baeza, confirma.
                                                                      Gutierre Ruiz, Alcalde de Toledo, confirma.
Gutierre Fernández, confirma.             
                                                                               El Alguacil, Julián Decapela, confirma.    
García Garcíaz de Aza, confirma.
                                                                                    El Alguacil, Julián Pérez, confirma.



Nuño Pérez, Alférez del Emperador, confirma.

                                                                          Esteban Abembram, Zalmeida, confirma.
Juan Fernández, Chantre y Canciller del Emperador, mandó escribir esta carta.”.
Carta Puebla de S. Miguel.
Carta Puebla de Madridejos.
Carta puebla de Villaviciosa.
Carta Puebla de Bilbao.

miércoles, 17 de noviembre de 2010

Comienza la Historia.


    Por el momento nos dejaremos de tiempos tan remotos, a sabiendas de que seguramente, cualquier vestigio de ellos se perdió en la memoria de los habitantes de estas tierras.
    Nos ceñiremos a los retazos de historia que han llegado hasta nuestros días.
    Fundada Illescas, según cuentan, por los griegos Curetes  (Κουρήτες) o por griegos Almunides, (depende de la fuente).

      Según podemos leer en el libro “ Población General de España, Historia Cronológica, Blasones y Conquistas Heroicas, descripciones agradables, Grandezas Notables, Excelencias Gloriosas y Sucesos Honorables “ ( Título largo donde los haya). Escrito por Juan Antonio de Estrada en 1748.
Se cita textualmente:
“ Se llamó Titulcia, nombre romano del Emperador Tito, que se sospecha fue a su honor cimentada pero tal vez reedificada porque hay quien diga que fue de los Griegos Almunides y que se llamó Illarcuris_ y parece más cierto, pues de esto quedo Illescas.”

El escritor Alvaro Galmés de Fuentes, en su libro “Los topónimos; sus blasones y Trofeos (la Toponimia Mítica) año 2000.
Nos dice que el nombre de Illescas, está en relación con la raíz pro_ indo-europea il_”ciudad”, y que con diferentes terminaciones tenemos en la península, ilibirri_ “ciudad nueva” Ilerda_ “Lérida”, Ilurcis_ “Lorca” etc.
En nuestro caso sería _isica o esica_ Quedando entonces en Ilesica según el romance prelisesiano centro-meridional.
Por su simplificación mozárabe Iliesca_ de donde nos llega Illesca o Illescas.




 El caso es que nuestra villa, ha atravesado varias alternativas de esplendor y decadencia, hasta llegar a su estado actual.
Suponemos que teniendo en cuenta la costumbre de los antiguos de poner a los pueblos que fundaban o conquistaban nombres de su patria y lengua, el de Ilarcuris, que es el primitivo que conocemos, se derivaría de Ili-Curis, o ciudad de Curetes.
Cuando estos abandonaron la península debido según (siempre los historiadores que no se ponen de acuerdo), a la pertinaz sequía que hubo. Cuando estos repito abandonaron la península, llegaron los Cerritanos o Curitanos (a los que la sequía no les debió importar, o que sabían como  sacar el  agua, vete tú a saber). Estos Cerritanos a los que algunos llamaron Almunides, fueron los primeros en edificar fortaleza o colonia y sirvió de refugio como ciudad sacerdotal.
Tabla de Europa
  
   Ptholomeo , en el año 162, en su segunda tabla de Europa, cita a Ilarcuris en la Carpetania y señala exactamente su situación en grados respecto a Toledo.

Ya no se vuelve a tener noticia o mención alguna de la Villa, hasta el año 636 en que S. Julián, Arzobispo de Toledo, al hablar de S. Ildefonso, dice, fundó un Monasterio de religiosas en la Villa. El motivo de tan largo intervalo, fue, indudablemente debido a la desaparición casi por completo de la población hacia el año 433, en que hubo epidemias mermando la población de casi todos los habitantes de la Carpetania, sobre todo Madrid y Toledo.

Tomado éste y su provincia por los árabes e, indudablemente, debido a su situación, la restauran y conservan, no como plaza fuerte, sino como lugar de recreo y utilizan y mejoran su hermoso Alcázar ( parece que estoy hablando de otro pueblo a que si??) .
Reconquistada, el rey Alfonso VI la donó a la iglesia de Toledo, de cuyo poder pasó a la de Segovia, (no se sabe ni como ni por qué). Pero durando poco su dominio, pues el año 1124 el rey Alfonso VIII lo realizó. Años antes, en 1154, aquel monarca firmó la carta puebla de esta ilustre e imperial villa. En cuanto a la carta de truco, lleva fecha de 21 de marzo de 1124.


viernes, 12 de noviembre de 2010

En Lontananza...



A estas alturas de la historia, creo que habrá pocas personas, que no sepan donde está ubicada la Villa de Illescas, pero para empezar el cuento por el principio, tendremos que decir, que está asentada en la parte septentrional de la “muy fértil” llanura de la Sagra, (comarca natural castellana comprendida entre el río Guadarrama y el río Tajo-no reconocida jurídicamente- que incluye localidades pertenecientes a la provincia de Madrid y a la provincia de Toledo,).

Esta comarca debió merecer en remotos tiempos de la predilección del hombre prehistórico, pues antaño se encontraron numerosos instrumentos de piedra que así lo daban a entender. Unos tallados en silex y otros en silimanita (fibrolita).

Uno de los lugares donde más herramientas de este tipo se hallaron, fue en los Cerros del Prado. Situados al Sur Este de la población. Estos cerros llamados popularmente como los “Cerros Blancos”.
 Durante décadas han sido utilizados como vertedero municipal, siendo así, que sería preciso excavar varias capas de basuras, tierras y escombros, para poder encontrar algún vestigio de estos “utensilios” del pasado, pues de otra manera sería totalmente imposible.

Están atravesados por la vía férrea, al hacer su tendido fueron hallados numerosos y grandes huesos fósiles de animal antediluviano. Rotos en trozos pequeños para repartírselos ignoramos la suerte que aquéllos pudiesen correr.
Hace tiempo se conservaba en la localidad uno, y que según por su aspecto y condiciones parecía ser un fragmento de superficie articular de un animal de gran tamaño ¿Sería quizás un gran Saurio?? Quién sabe, el hueso en cuestión está desaparecido, descatalogado, o perdido, los gobernantes nunca tuvieron demasiado interés en preservar ningún tipo de descubrimiento.

Herramientas de Silex


Es curioso pensar, que el hombre prehistórico tuvo que transportar la fibrolita desde  una distancia de no menos de 70 Km., concretamente de la Sierra de Guadarrama. Este sitio al parecer es el más próximo a nuestra población, donde se da este tipo de mineral, estos hombres del paleolítico debieron transportar la fibrolita para la construcción de objetos diversos, y prueba de ello fue el hallazgo de un trozo de tamaño bastante grande, en el cual se podían apreciar las huellas quedadas al arrancar porciones .


A si que, nos queda divagar sobre la hipótesis de considerar esta región como centro de producción análogo al de instrumentos de silex, (exclusivo de los Cerros del Prado).  Lamentablemente de todo esto, no tenemos idea en el actual Illescas, estos instrumentos fueron desapareciendo, unos por dejadez, otros por codicia. Los que fueron hallados hace más de cien años, están perdidos para siempre, y los que se van encontrando en la actualidad, al acometer diversas obras públicas o privadas, se entierran y se silencian, para que nadie pueda parar las obras, y no se pierdan los millones invertidos.

Pero podríamos pensar ¿Qué condiciones reuniría este enclave, en aquellos remotos tiempos? La verdad que es cierto que lo ignoramos, pero de su bondad nos hablan estos numerosos y variados restos,  aunque tengamos que creerlo a través de un pedazo ajado de papel o de un medio informático, para que al menos ese trecho de memoria no se pierda como ocurrió con todo lo encontrados, de tan diversas épocas.
¿¿Pudieron ser parecidos los restos encontrados en nuestra Comarca??, nunca lo sabremos

martes, 9 de noviembre de 2010

En el Principio

Plaza de las cadenas nevada
“Al dar estas líneas a la publicidad no me propongo descubrir Illescas. Nada de eso. Más humilde aún, su móvil sólo tiene una mira fija: la de intentar, por todos los medios, se conserven los magníficos tesoros artísticos que aún existen y que de verdadera casualidad se han podido librar de la ignorancia de muchos, los descuidos de varios y la desidia de todos. ”

Alberto Aguilar Carmena, “Illescas. Notas histórico Artísticas” (Madrid. Hauser 1927)

 Mi afición por la historia y las cosas del pasado, me han llevado a poseer, documentos y publicaciones de  más de cien años, de esta manera me fui enterando poco a poco ,  de aquellos usos, tradiciones y costumbres, que encerraba este pueblo donde el destino tuvo a bien que naciese. Y que comúnmente entre los lugareños, se refieren a el como “Mi Pueblo”.

Con el devenir de los años, “Mi Pueblo” se ha ido convirtiendo poco a poco, en una “mini” ciudad dormitorio, en la que, numerosas y relucientes viviendas de nueva construcción, han sido cimentadas a lo largo y ancho de esta Villa, que según dicen los expertos, ya en la Carpetanía, se referían a ella, como Illarcuris (ciudad de Curetes).
Illescas Vista General

Cuando Alberto Aguilar Carmona, escribió su libro, no podría sospechar siquiera el Illescas actual, pero  ya tenía la certeza de que, aunque siempre  fué, una de las localidades donde el cúmulo de recuerdos históricos, sus joyas artísticas y su enclave estratégico entre la Ciudad Imperial de Toledo y la Villa de Madrid, le dieron nutrida fama entre Reyes, Artistas y escritores. El hecho es que toda su conservación y pureza artística han sido profanadas, deslucidas y enterradas sin ningún pudor por parte de los gobernantes y sin ninguna oposición por parte del pueblo.

 Ya pasaron al olvido, de nuestra memoria, las joyas de la iconografía como la Talla del Salvador del Mundo del siglo XIII desaparecida en la guerra civil o las tallas de los Cuatro Evangelistas atribuidas al Greco o a su hijo ( los historiadores no se ponen de acuerdo en este punto)  el cuadro  “Los Desposorios de la Virgen” que alguien expolió a finales del siglo XVIII, amén de otras muchas de las que no se tienen constancia y nunca fueron catalogadas o en su defecto lo fueron pero ya no queda vestigio alguno para seguirles la pista.

Como escribe Arturo Pérez Reverte, “cada uno tiene sus lugares, los amuebla con los libros leídos, con la imaginación y con la propia vida”. Que gran frase para recapacitar.
 En todo caso y usando este medio informático  quiero dar a conocer, no solo enclaves de Illescas ,desconocidos por muchos de sus habitantes, si no también rendir homenaje a todos los que alguna vez, sintieron la necesidad, de recopilar datos para transmitírselos a los demás.

Con la humildad de ser simplemente un alma nacida en Illescas, dedico este Blog, a todos los habitantes de “Mi Pueblo”.

Nevada 2010