Coloquialmente conocida
como “La cruz de la Plaza de los Toros”, esta columna de piedra a formado parte
de nuestro paisaje local, y no pocos se han preguntado siempre, para que sirvió
o que significaba…
Básicamente se trata de
una columna de piedra asentada sobre cuatro marmolillos cubiertos con mortero,
sostiene en lo alto una cruz de hierro forjado… aunque no se han encontrado
datos concretos en la Villa de Illescas, nos fijaremos en la similitud que
tiene con otros Rollos como el de Berlanga de Duero, el Rollo Picota de
Tembleque, en Toledo, o los Cruceros tan abundantes en la comunidad Gallega…
Paseando por la
geografía española, podemos encontrar muchos de estos “símbolos” presentes en
la actualidad, en entradas, salidas o plazas…símbolos que permanecen
desposeídos de su significado, ese significado que un día sirvió para erigirlos
en tan distintivos lugares.
Los rollos o picotas,
consisten en un conjunto escultórico de piedra formado por escalones, mástil,
capitel y remate. El empleo indistinto de ambas definiciones para referirse a
una misma institución, sirve en ocasiones para perfilar las diferencias que
existieron entre ellos.
El rollo, era un símbolo
jurisdiccional que se levantaba por orden real en las villas, señalando no sólo
el villazgo de la población, sino también el régimen al que se hallaba sometida
dicha población ( señorial, realengo o eclesiástico)… quiero pensar que por su
similitud, nuestra “ Cruz de la Villa” es de este tipo.
En el caso de la Picota,
su función era la de servir para la exposición a la vergüenza pública de los
reos, para azotarlos, e incluso mutilarlos o ejecutarlos. Dejando allí para
muestra y escarnio, sus miembros amputados o sus cadáveres. Estos últimos usos,
al parecer serían menos habituales, por ser los castigos más graves y
ocasionales delitos, sino también porque para el cumplimiento de la pena
capital se usaba otro instrumento penal: la horca.
Rollo de Tembleque Toledo |
Según la obra “Los
rollos jurisdiccionales” de Luis Miravalles Rodríguez, las picotas, que en un
principio fueron de madera, serían anteriores a los rollos, situándose el
origen de aquéllas en el siglo XIII, mientras que el rollo, asociado a los
señoríos aparecería ya en el siglo XIV. Dato que constata que el de nuestra
villa es de estos últimos.
Para sacar una idea más
clara de este símbolo, necesitaríamos hacer un estudio antropológico, el cual,
lo cierto es que no me siento capacitada para elaborar, pues retrocediendo en
la historia, tendríamos una serie bastante heterogénea de elementos parecidos,
monolitos, menhires, tótems…mojones, hermai, miliarios etc…un conjunto que
necesitaría un especialista para su clasificación y para estableces sus
semejanzas comunes.
Volviendo a nuestra Cruz, el remate como he dicho , lo forma una cruz , casi siempre metálica, aunque sin la figura del crucificado, esta presencia de las cruces, en la cúspide de los rollos, ha sido interpretada a menudo por los expertos, como un signo de afirmación cristiana frente a los moros, en unos tiempos de repoblación y fronteras cambiantes, sin embargo, podemos creer que esta institución tendría mayor peso en su componente jurídico, que religioso, aun cuando en las sociedades que los erigieron, ambos tendrían el mismo poder. En defensa de esta teoría podemos destacar el hecho de que durante la conquista de América, los españoles, ya sin musulmanes en el horizonte, continuaron empleando los rollos en las ciudades que se iban fundando, lo que demuestra que dicha institución estaba incorporada como un componente interno y propio del proceder imperialista hispano.
Volviendo a nuestra Cruz, el remate como he dicho , lo forma una cruz , casi siempre metálica, aunque sin la figura del crucificado, esta presencia de las cruces, en la cúspide de los rollos, ha sido interpretada a menudo por los expertos, como un signo de afirmación cristiana frente a los moros, en unos tiempos de repoblación y fronteras cambiantes, sin embargo, podemos creer que esta institución tendría mayor peso en su componente jurídico, que religioso, aun cuando en las sociedades que los erigieron, ambos tendrían el mismo poder. En defensa de esta teoría podemos destacar el hecho de que durante la conquista de América, los españoles, ya sin musulmanes en el horizonte, continuaron empleando los rollos en las ciudades que se iban fundando, lo que demuestra que dicha institución estaba incorporada como un componente interno y propio del proceder imperialista hispano.
Con el pasar de los
años, estos elementos propios de la nación histórica, los rollos encontrarían
su fin con el nacimiento de la nación política. Estos símbolos de una sociedad
que se sustentaba en las relaciones de señorío y vasallaje, perderían todo su
sentido con la transformación de la sociedad, un colectivo de ciudadanos
teóricamente iguales ante la ley. No es por casualidad que en España, tras la declaración
de la Constitución de Cádiz, de 1812, los rollos quedaran convertidos en
reliquias del “Antiguo Régimen”… Siendo mediante el Decreto del 26 de mayo de
1813 cuando éstos encuentren el fin definitivo de su vigencia jurídica aun
cuando muchos de ellos sobreviven en la actualidad, como es el caso del de
nuestra Villa.
En el caso de que el
nuestro haya sido restaurado, y que siga en el sitio en el que está, me da la
certeza de que los gobernantes que nos precedieron, todos y cada uno de ellos,
ignoraban completamente, el significado de dicha “Cruz”
Para ellos y para todos
los Illescanos, que piensen en que este rollo o esta cruz, significaban algo
bueno, les dejo el Decreto, que contiene argumentos que delatan la ignorancia de lo que en realidad significa dicho
“símbolo”.
fotografía tomada del blog, de la Tertulia. |
“Accediendo a los deseos que han manifestado
varios pueblos, es por lo que los Ayuntamientos procederán a demoler todos los
signos de vasallaje que haya en sus entradas, puesto que los pueblos de la
nación española no reconocen jamás otro señorío que el de la Nación misma, y
que su noble orgullo sufriría tener a la vista un recuerdo continuo de su
humillación”
Rollo de Jarandilla de la Vera, Cáceres. |
Actualmente, mucha gente
está en contra de ciertos símbolos de nuestra nación, pero seguimos
conservando, aquellos, que significaron, que simplemente fuimos vasallos, plebeyos
a las órdenes del Señorío, tal vez existan por que cambiaron esos señoríos por
puestos en la política demasiado relevantes, y siguen humillando e
infravalorando al pueblo que los dio ese poder.
Doy las gracias a mis
amigos de Facebook, que han hecho posible, que después de más de un año, me
ponga a teclear y a escribir, estos aspectos de la historia que nunca deberían
ser olvidados, y que son tan importantes…